20 abril, 2008

Mejor que "unos ojos lindos", es "unos ojos lindos que me veian"

31 enero, 2007
Ficción
Tarde del 30 de enero (ayer), como a las 7pm .En la pequeña sala de mi casa .Todos los sitios en los sillones estaban copados .Tema de conversacion: variados, uno llevaba al otro y así sucesivamente .Pela: Un lugar llamado Notting Hill .Escena : William (hugh grant) invita a Anna Scott (julia roberts) a la casa de sus amigos, sin saber que luego de cierto rato nadie se sentiría incómodo y que las risas serían compartidas (sí, todos reian y eran felices) .Yo fui William (aunque sin decir tantas estupideces típico del templadazo), ella, Anna Scott (sin ser actriz, sin tener otra vida, sin tener máscaras) .Muy felizmente no me he enamorado de ella (por un momento la ocasión me puso la piel de gallina pues era ella y mi familia, nadie mas... y apuesto que a más de uno se le pasó por la cabeza la idea que yo estaba saliendo con ella), ni son mis intenciones (felizmente, sí otra vez) .Es solo que no todos los dias una chica se sienta por largo rato en una tarde de dia de semana en mi sala y congenia (asi hayan sido tan solo unos minutos) de esa manera con toda mi familia. Fin.
Pintado por noah a las
1/31/2007 09:30:00 AM 1 se atrevieron


El jueves último, despues de casi 1 año y 3 meses de escribir este post, salí con ella a tomar algo a un cafe miraflorino, sin mas intenciones que actualizar eventos y sucesos que nos han ocurrido estos ultimos meses (por ahi un par de regresos en el tiempo que nos llevaron a epocas en las que ni nos conociamos). Un té de jamaica mordaz (no debi acordarme de quien mas pidio alguna vez ese té, no debi no debi...), un hambre del pan que ella pidio, unos tragos en el bar reservados para nosotros que no pedimos, unos ojos lindos (que me veian) de anime que sin querer descubri en su rostro, una inquietud pequeña por saber qué tan presente tenia el cafe que tomamos en enero, una tristeza no evidente por no enterarme de la existencia de sus lagrimas durante su tiempo de ruptura y post-ruptura, una tristeza ajena y amarga por lo que descubrio ella luego que abrio los ojos, unos dedos palidos delicados y unas manos vacias (presentí que estaban adoloridas, que esperaban por alguien quien las sane y cuide) que me hubiera gustado rozar con las yemas de mis dedos, y unos silencios evitables que me hubieran gustado reemplazar con situaciones divertidas como la de "mi nariz está emocionada".

Sí, es cierto... (sin proponermelo) la llegué a mirar con otros ojos.
Sí, también es cierto... ayer me demoré en responder cuando mi hermana me preguntó "que, pero te gusta?".

Quiero salir con ella otra vez (ya se lo dije).
Quiero sacudir esta inquietud que me estruja por dentro.
Quiero no dejarme llevar por aquellas cosas que alguna vez ella me confesó.
Quiero que ella termine su ciclo (que le devuelva su cd y su vestido rojo).
Quiero verla en ese vestido rojo.
Quiero estar demasiado seguro de querer darle un beso antes de hacerlo.

Ante todo, quiero que siga siendo mi mona.

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