20 octubre, 2007

Extracto de notas de Ayla

Se desfiguran las siluetas en el espejo, y veo como Carlos estira la mano, como danzando para desfigurarnos, y esa mano nos alcanza y nos volvemos sombras, pedazos de mancha en el espejo que se trituran mientras la mano de Carlos nos revuelve delirante. Despierto y solo puedo ver con un hojo, ojo se escribe sin h; me despierta definitivamente el celular con Raúl al otro lado.

Raúl dice que todo es confuso en estos días de vacaciones, que no es el mismo de antes, siendo incapaz de sentir cualquier situación intensa, sentimientos puros como el amor, o la tristeza, solo puede sentir una cólera amarga que le sube por el pecho, quemándole cada órgano, con imposibilidad de ver mas allá de esa amargura cotidiana que es ahora su vida, incapaz de comprender al otro mientras se deshumaniza; yo trato de darle aliento diciéndole que en un entierro las cosas no son bellas, que nadie quiere dolor y entonces como desorbitado voltea lentamente y grita con los ojos un grito mudo.

Raúl sale y toma fotos, toma café, toma aire, en su casa todo es tranquilo, llega y y la primera semana se siente a gusto en la provincia, charlando con sus padres y durmiendo hasta tarde y teniendo que lavar los platos luego del almuerzo, en la segunda semana en la provincia no tolera más su casa y a este mini refugio que es Trujillo en enero, entonces se matricula en un curso de verano, coge la camera, la maleta, las recomendaciones de su padre y el bus rumbo a lima con la cámara al hombro.


por Ayla (http://www.elsilenciotb.blogspot.com/)